MÁS QUE MODA, cuando Balenciaga construía la arquitectura de sus prendas
Tot-Hom, un armario completo de mujer
La tradición regresó al Hotel Princesa Sofía el pasado 25.02 cuando Tot-Hom destapó insobornables colecciones de primavera-verano para este 2016 a una clientela devota colmadas de matices y agudos planteamientos sobre cómo equilibrar la vida de la mujer de hoy, más compleja que nunca. En su línea Pret-à-Porter, un estallido de finura, color y comodidad navegó por un desfile demoledor de sofisticación simple que nos facilita la vida (a la mujer) y, sobre cómo rescatar los aires setenteros y vestir la tendencia de los pantalones pesqueros de campana, Tot-Hom vence.
Su singular Línea A mostró combinaciones poco exigentes pero muy útiles para afrontar el día, y, al compás de los nuevos tiempos, predomina el calzado cómodo y masculino.
En Alta Costura, fundió géneros en un solo traje con extraordinario detalle artesanal mientras nos hechizaba con flores y más flores, tul, y seducción a fuego lento desatando chispas por vestidos en seda dupioni. El rojo brillante, el azul eléctrico, los verdes y el amarillo pomposo rompieron el lenguaje del desfile vistiendo la pasarela de soberbias piezas.
Los cortes imperio y bailarina bañan su colección Novias en un nuevo romanticismo resultando vestidos impecables en sedas dupioni y gazaar con bordados a mano sin uniones visibles.
Un espectáculo que viajó a la década de los 50 con volantes que se retuercen en siluetas hiperfemeninas cuando Cristóbal Balenciaga construía la arquitectura de sus prendas para que encajaran en el contorneo del cuerpo y triunfaron en su propósito (la marca Tot-Hom y el diseñador Balenciaga).
Autoría de Adelaida Subías
Photo Credits: Adelaida Subías
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